Creado en 2005 en Nueva York por Sam Ross, barman australiano que inició su camino en Melbourne y que actualmente triunfa en los Estados Unidos dirigiendo las barras de los reconocidos restaurantes Milk & Honey y Little Branch; además de asesorar cartas de coctelería en Los Ángeles y San Francisco. En una gélida noche de invierno experimentando, tuvo la idea de mezclar whisky con jugo de limón, jengibre y miel, creando así la primera versión del Penicillin que poco después se perfeccionó hasta la receta actual.
En pocos años el cóctel Penicillin se ha convertido en lo que se llama un nuevo clásico de la coctelería y su receta se ha expandido por las mejores barras de todo el mundo.
Siguiendo las indicaciones de su nombre, el cóctel Penicillin está recomendado para hacer revivir el cuerpo sobre todo durante el invierno y en sitios muy fríos. Seguramente no es tan potente como una vacuna contra la gripe, ni dispone de las propiedades curativas de un antibiótico, pero su gran complejidad aromática nos sorprenderá sin duda.
Combina los sabores cálidos y calmantes de la miel, con el limón y el picante del jengibre fresco. Toma fuerza con una buena dosis de Whisky escocés y por si no teníais bastante, le añadimos una fina capa de Whisky de malta ahumado de la zona escocesa de Islay para ganar potencia.
Ingredientes
- 50 ml de Whisky escocés
- 2 cucharadas de miel
- 2 láminas de jengibre fresco
- 30 ml de jugo de limón
- 5 ml de Whisky ahumado
Preparación
- Colocar en una coctelera la miel, el jugo de limón y el jengibre. Machacar con el pisón de un mortero para extraer los aromas del jengibre y disolver la miel.
- Agregar el whisky escocés con abundante hielo y batir enérgicamente por 20 segundos.
- Colar la bebida en un vaso Old Fashioned sobre tres hielo nuevo.
- Agregar sobre la bebida el whisky ahumado para que quede “flotando” sobre la bebida y le de un aroma especial al trago.
- Decorar con romero fresco o piel de limón (opcional).
A disfrutarlo!